Tras la queja de diversas entidades sociales, la defensoría ha pedido información al consistorio para saber si ha cambiado el circuito para la tramitación de los informes de conocimiento de residencia
La Sindicatura de Greuges ha pedido información al Ayuntamiento de Barcelona sobre la tramitación de los informes de conocimiento de residencia (ICR), necesarios para garantizar el empadronamiento de personas sin domicilio fijo en la ciudad.
Esta petición de información parte de la queja de una entidad social que atiende a personas que están en situación de calle y que necesitan empadronarse, y coincide con lo que también manifiestan diversas entidades. Según esta queja, la Oficina de Prestaciones Sociales y Económicas del Ayuntamiento de Barcelona, donde esta entidad se dirigía habitualmente para realizar este trámite, ahora no registra las peticiones para realizar el ICR y se les dirige a otros servicios, la lo que retrasa el proceso de empadronamiento varios meses.
Dificultades y cambios en el circuito de tramitación
La entidad promotora de la queja expresa que acudió a la Oficina de Prestaciones Sociales y Económicas del Ayuntamiento de Barcelona a presentar la instancia para pedir el ICR, tal y como hacía habitualmente. Desde hace algunos meses, al día siguiente de realizar esta gestión las personas interesadas recibían un mensaje en su teléfono móvil conforme no se había podido corroborar su domicilio, sin que previamente recibieran ninguna llamada.
En alguna ocasión, el teléfono de contacto facilitado en la instancia era el de personas trabajadoras de la entidad, que pudieron comprobar esta práctica municipal.
La Oficina de Prestaciones Sociales y Económicas ha comunicado recientemente a la entidad promotora de la queja que ya no emiten ICR y que es necesario acudir al SAIER o al Servicio de inserción Social (SIS), en el supuesto de que la persona haga más de un año que reside en Barcelona.
Tanto en el SAIER como en el SIS hay que ir con cita previa, y no hay disponibilidad hasta un mínimo de tres meses. Posteriormente, se debe realizar un seguimiento, entrevistas, etc. Entre tanto, la persona no puede acceder a los servicios que requieren de empadronamiento, (como los servicios de salud) y las personas que tienen menores a cargo tampoco pueden escolarizarlos.
Un impedimento por el disfrute de derechos
Últimamente, las personas en situación de calle podían acceder al empadronamiento sin domicilio fijo mediante los ICR registrados en la Oficina de Prestaciones Sociales y Económicas, por lo que obtener el informe era independiente de recibir atención social en otros servicios del Ayuntamiento. Pero si este trámite requiere de la atención social previa de servicios como SAIER o SIS, que además tienen una fuerte presión asistencial, se dilata el proceso de empadronamiento.
Esta situación es especialmente preocupante si tenemos en cuenta que el empadronamiento es uno en metaderecho, es decir, es la puerta de acceso al disfrute de otro conjunto de derechos como el acceso a la sanidad, al sufragio universal oa determinados ayudas.