En el acto de reparación dirigido a las personas que sufrieron violencias sexuales en la Escuela Barcelona, la sindicatura de greuges de Barcelona y el Ayuntamiento de Barcelona han pedido perdón a las víctimas y han expresado su firme compromiso con la protección de la infancia y la adolescencia.

El evento, celebrado en el Saló de Cent del Ayuntamiento, se ha centrado en contribuir al proceso de reparación del daño causado, destacando la obligación de evitar que vuelvan a ocurrir vulneraciones de derechos como las que sufrió el alumnado de la Escuela Barcelona por parte de un educador durante las décadas de 1980, 1990 y 2000. Durante el acto, los representantes institucionales han reconocido la gravedad de los hechos denunciados y han asumido la falta de actuación de las administraciones responsables.

Los representantes de las administraciones que han participado en el primer acto de reparación realizado en el Estado por una administración en casos de abusos en una escuela pública han sido el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni; la secretaria de Mejora Educativa del Departamento de Educación, Josefa Beltran; y el síndic de greuges de Barcelona, David Bondia. También ha participado el Chief Compliance Officer del FC Barcelona, Sergi Atienza, dada la vinculación de la institución educativa con este club durante los años en que se denunciaron los hechos, junto con el actual equipo directivo de la Escuela Barcelona.

En un acto pionero de reparación de abusos y violencias, el alcalde de Barcelona condenó “unos abusos que nunca deberían haberse producido”. En este sentido, Jaume Collboni se dirigió a las víctimas para reconocer “la responsabilidad institucional en el profundo dolor que habéis vivido y que, en muchos casos, sigue acompañándoos en el día a día”. “En nombre de Barcelona, del sistema educativo y de la administración pública, quiero deciros de manera muy sincera que lo sentimos”, afirmó.

El alcalde se comprometió a “impulsar con el resto de instituciones todas las acciones necesarias para que hechos como estos no vuelvan a repetirse”.

David Bondia, el síndic de greuges de Barcelona, explicó que, gracias al goteo de casos de abusos surgidos, “hemos tomado conciencia de que estamos ante un fenómeno impune y sistémico, no abordado en profundidad”, lo que “nos debe llevar a reflexionar sobre la responsabilidad invisible de una sociedad que ha abandonado a miles de ninos, niñas y adolescentes”. En cuanto a la Comisión de Reparación, recordó que se trataba de un “órgano independiente e interdisciplinar, que tenía como finalidad dar respuesta a las necesidades de reparación de las víctimas”. Y concluyó con una reflexión final: “Las personas no lo cuentan cuando quieren, sino cuando pueden. Entonces, muchas veces, se encuentran con el muro de la impunidad y el encubrimiento”.